En estos días conseguir insulina en las farmacias se ha vuelto complicado. “No tenemos en stock por ahora”, “Hay que esperar a que lleguen”, “Se está demorando en venir”, son algunas de las respuestas que dan dependientes de estos establecimientos a quienes llegan por este insumo vital para pacientes que padecen de diabetes.
La mañana del lunes, en la mayoría de las distribuidoras farmacéuticas más grandes de las calles Ximena y Alejo Lascano no hubo disponibilidad del producto. Lo mismo se evidenció en farmacias situadas en las inmediaciones del hospital Teodoro Maldonado Carbo, del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).
Aracely Basurto, presidenta de Fundación Vida (Fuvida), organización sin fines de lucro que apoya, educa y provee insumos en donación y a bajo costo a las familias que tienen niños, adolescentes o jóvenes con diabetes tipo 1, señaló que este problema de aparente desabastecimiento de insulina se evidencia desde hace tres meses.
Ella sostuvo que aquello ocurre con una insulina de acción corta que se usa en el tratamiento de menores, principalmente a la hora de alimentarse.
“No hay en las farmacias y los padres se han visto en la necesidad y en la desesperación de andar buscando de farmacia en farmacia o pidiéndole a las cadenas que busquen dónde hay una o pidiendo a las personas que si les pueden cambiar o si les pueden dar”, expresó Basurto, y añadió que Fuvida asiste actualmente a 500 niños y jóvenes.
Ella comentó que la falta del insumo médico es a nivel de farmacias y hospitales, pues la organización que preside ha provisto de dicho insumo a casas de salud públicas, ya que la fundación recibe dotación de instancias internacionales.
“Esto (falta del insumo) significa un problema bien difícil, ya que la insulina es vida para estos niños y jóvenes, bueno, las personas insulinodependientes, ellos no pueden estar sin insulina ni tres horas porque la necesitan para vivir”, refirió Basurto, y explicó que estos pacientes con diabetes tipo 1 necesitan inyectarse cuatro veces al día para que la glucosa no se les suba a niveles de 500 mg/dl.
Clemente Orellana Sáenz, médico endocrinólogo del hospital Metropolitano de Quito, mencionó que este desabastecimiento en farmacias y en algunos sanatorios se evidencia tanto en Guayaquil como en la capital de la República.
La situación, sostuvo, supone el riesgo de que los pacientes lleguen a un coma diabético si no tienen el tratamiento adecuado con la insulina que requieren.
El galeno habló de problemas de stock con la insulina tipo NPH, de acción intermedia, de 100 unidades por mililitro, desde junio pasado. Eso pasa con los insumos de al menos dos laboratorios que comercializan el producto entre $ 14 y $ 18 con las respectivas rebajas.
La NPH es la tipología que se aplican 98 de cada 100 pacientes, por el costo y necesidades del tratamiento, indicó.
Orellana, quien es integrante de la Asociación Latinoamericana de Diabetes (ALAD), aseguró que sí hay insulina en presentación de esferográficos de 300 unidades, pero con este tipo el paciente requiere de un dispositivo para aplicársela, lo que implica un gasto adicional. También hay en el mercado, añadió, análogos del insumo que cuestan alrededor de $ 50.
“Yo creo que los laboratorios están presionando para vender el stock que tienen en esferográfico (…) Creo que los laboratorios están obligando a la gente a que compre el pen (insulina en empaque similar a un bolígrafo), o sea, la insulina en esferográfico. Deben tener un gran stock de esa insulina y ellos son los responsables de que no haya”, cuestionó el galeno.
En ese marco, exhortó al Ministerio de Salud Pública (MSP) a realizar las indagaciones y controles necesarios. Dijo que a pesar de que desde esta cartera de Estado le han respondido que sí hay insulina disponible, la realidad que se constata en farmacias y hospitales es otra.
Fuente: El Universo