Uno de los procesos que se vio afectado por la pandemia de covid-19 fue el de los trasplantes. En 2020 se realizaron 222, frente a los 676 de 2019, según el Instituto Nacional de Donación y Trasplante de Órganos, Tejidos y Células (Indot). Para 2021 hubo una ligera recuperación y se realizaron 475 intervenciones. Y de enero a marzo de este año, se contabilizan 129.
El Hospital Pediátrico Baca Ortiz, en Quito, es uno de los que reanudó las intervenciones después de dos años de suspensión por la pandemia. Antes de la emergencia sanitaria se ejecutaban hasta 57 cirugías de trasplante en esa casa de salud cada año.
El último 7 de enero, Juan y María Inés, tras años de espera, fueron seleccionados para recibir un riñón. Desde pequeños sufren problemas renales y han tenido que realizarse tratamientos de diálisis de manera permanente.
Según el Ministerio de Salud, en el país viven 150 pacientes pediátricos que deben someterse a diálisis de manera regular, 60 son atendidos en el Baca Ortiz.
Ese mismo mes, Jairo de 12 años, y Evelyn, de 8, también fueron beneficiarios de un trasplante de riñón. El líder del servicio de diálisis y coordinador del Programa de Trasplantes, Júnior Gahona, mencionó que se prevén realizar 40 procedimientos en este 2022.
La pandemia impidió donaciones de órganos
En el primer año de pandemia, parte de los 58 establecimientos de salud acreditados se volcaron a atender pacientes con covid-19 y solicitaron la inactivación temporal de sus programas, debido al alto riesgo de infección.
Patricio Ortiz, director ejecutivo del Indot, señala que a nivel mundial se registró una caída en la tasa de donación de órganos, lo que disminuyó la posibilidad de que pacientes que los requieren se beneficien de un trasplante.
En Latinoamérica, por ejemplo, bajó entre el 60% y 80%; y en el país fue casi del 90%. “De 7,7 donantes por millón que teníamos, pasamos a 0,21 y con una lista de espera de 1 748 pacientes. Necesitábamos reactivar el programa de donación”, menciona.
Para retomar las cirugías se establecieron lineamientos, que fueron desde la disponibilidad de camas en unidades de cuidados intensivos (UCI), tener áreas de aislamiento libres de covid–19 para el seguimiento de los pacientes, hasta una rigurosa evaluación clínica del receptor.
Lista de espera
El Director del Indot detalla que a escala nacional en la Lista de Espera Única Nacional de Trasplantes se encuentran 1 723 pacientes.
El más demandado es el trasplante de riñón, con aproximadamente 796 en la lista. Le sigue el hepático, con unas 33 personas en espera; un paciente que requiere pulmones, otro cardíaco y 892 personas que requieren córneas.
Ortiz señala que hay una escasez importante de órganos en el país debido a la disminución en la tasa de donación. Esta actualmente se ubica en 4,26 donantes por millón de habitantes.
El directivo detalla que desde 2004 a 2019 la tasa de donación fue de 7,77 por millón de habitantes con un promedio de crecimiento anual de 0,6 puntos.
Con la implementación de la estrategia nacional Reactivando la Salud, para recuperar los servicios esenciales en un 100%, se busca aumentar los establecimientos de salud que identifican y notifican donantes y capacitar a los equipos técnicos, para que la tasa de donación se incremente a 5 por cada millón de habitantes.
El trasplante que más se realiza en el país es el de córnea. El más demandado es el de riñón; hay cientos de personas en lista de espera. Foto: EL COMERCIO
Uno de los procesos que se vio afectado por la pandemia de covid-19 fue el de los trasplantes. En 2020 se realizaron 222, frente a los 676 de 2019, según el Instituto Nacional de Donación y Trasplante de Órganos, Tejidos y Células (Indot). Para 2021 hubo una ligera recuperación y se realizaron 475 intervenciones. Y de enero a marzo de este año, se contabilizan 129.
El Hospital Pediátrico Baca Ortiz, en Quito, es uno de los que reanudó las intervenciones después de dos años de suspensión por la pandemia. Antes de la emergencia sanitaria se ejecutaban hasta 57 cirugías de trasplante en esa casa de salud cada año.
El último 7 de enero, Juan y María Inés, tras años de espera, fueron seleccionados para recibir un riñón. Desde pequeños sufren problemas renales y han tenido que realizarse tratamientos de diálisis de manera permanente.
Según el Ministerio de Salud, en el país viven 150 pacientes pediátricos que deben someterse a diálisis de manera regular, 60 son atendidos en el Baca Ortiz.
Ese mismo mes, Jairo de 12 años, y Evelyn, de 8, también fueron beneficiarios de un trasplante de riñón. El líder del servicio de diálisis y coordinador del Programa de Trasplantes, Júnior Gahona, mencionó que se prevén realizar 40 procedimientos en este 2022.
La pandemia impidió donaciones de órganos
En el primer año de pandemia, parte de los 58 establecimientos de salud acreditados se volcaron a atender pacientes con covid-19 y solicitaron la inactivación temporal de sus programas, debido al alto riesgo de infección.
Patricio Ortiz, director ejecutivo del Indot, señala que a nivel mundial se registró una caída en la tasa de donación de órganos, lo que disminuyó la posibilidad de que pacientes que los requieren se beneficien de un trasplante.
En Latinoamérica, por ejemplo, bajó entre el 60% y 80%; y en el país fue casi del 90%. “De 7,7 donantes por millón que teníamos, pasamos a 0,21 y con una lista de espera de 1 748 pacientes. Necesitábamos reactivar el programa de donación”, menciona.
Para retomar las cirugías se establecieron lineamientos, que fueron desde la disponibilidad de camas en unidades de cuidados intensivos (UCI), tener áreas de aislamiento libres de covid–19 para el seguimiento de los pacientes, hasta una rigurosa evaluación clínica del receptor.
Lista de espera
El Director del Indot detalla que a escala nacional en la Lista de Espera Única Nacional de Trasplantes se encuentran 1 723 pacientes.
El más demandado es el trasplante de riñón, con aproximadamente 796 en la lista. Le sigue el hepático, con unas 33 personas en espera; un paciente que requiere pulmones, otro cardíaco y 892 personas que requieren córneas.
Ortiz señala que hay una escasez importante de órganos en el país debido a la disminución en la tasa de donación. Esta actualmente se ubica en 4,26 donantes por millón de habitantes.
El directivo detalla que desde 2004 a 2019 la tasa de donación fue de 7,77 por millón de habitantes con un promedio de crecimiento anual de 0,6 puntos.
Con la implementación de la estrategia nacional Reactivando la Salud, para recuperar los servicios esenciales en un 100%, se busca aumentar los establecimientos de salud que identifican y notifican donantes y capacitar a los equipos técnicos, para que la tasa de donación se incremente a 5 por cada millón de habitantes.
Al tratarse de una operación que requiere una logística que brinde rapidez, Ortiz menciona que actualmente también se está trabajando en disminuir el tiempo entre la extracción del órgano del donante y el trasplante.
Fuente: El Comercio