Conformar una comisión mixta, con miembros del Parlamento y del Ejecutivo, fue el pedido que el presidente de la Asamblea Nacional, Virgilio Saquicela, hizo al mandatario Guillermo Lasso a través de una misiva para empezar así a consolidar el diálogo entre las dos funciones del Estado. La iniciativa es vista con buenos ojos por la mayoría de los legisladores y también por el Gobierno.
El ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, considera correcta la invitación hecha por Saquicela. “Nunca nos hemos negado al diálogo, pero este debe hacerse sobre bases correctas. Tomamos nota de la carta, que nos parece una invitación correcta, y estaremos tomando definiciones los próximos días”, indicó a este Diario.
En la misiva, Saquicela reiteró que cree que “el diálogo es el único camino para lograr acuerdos en pro de una legislación que operativice los derechos de los ecuatorianos”, la que reconoció que tiene doble vía, por lo que “es necesario dejar de lado cualquier divergencia y poner por delante el interés del Ecuador”.
El legislador Alejandro Jaramillo (antes de la Izquierda Democrática), presidente de la Comisión de Justicia, menciona que siempre ha sido partidario de que existan mesas técnicas entre las funciones, que permitan articular y trabajar de manera conjunta, por lo que espera que el Ejecutivo reflexione y tome decisiones lo más pronto posible para ver quiénes podrían integrar esta mesa técnica.
“Desde el primer día en que llegamos a este periodo legislativo, es decir, el 14 de mayo de 2021, le hemos propuesto al presidente de la República que se elaboren mesas técnicas que permitan articular y trabajar de manera conjunta. No solo por los seis vetos totales que nos ha remitido, obstaculizando el trabajo de la Asamblea Nacional, sino por los nuevos proyectos de ley que nos ha enviado y los que remitirá más adelante”, indicó.
Jaramillo recuerda que, antes de enviar la reforma tributaria, propuso a la entonces ministra de Gobierno, Alexandra Vela, reunirse antes de enviar el texto final para que llegara al Parlamento con un trabajo previo que significara respaldos y votos.
“Lamentablemente, esto no fue escuchado y vemos los resultados: seis vetos totales, incluido el de la Contraloría, presentado por el actual ministro Jiménez”, apuntó.
Paola Cabezas, legisladora y excoordinadora de la bancada de Unión por la Esperanza, manifestó que los pocos proyectos que el Ejecutivo ha enviado a la Asamblea han sido rechazados por incumplir normas elementales de la Ley Orgánica de la Función Legislativa, porque eran inconstitucionales o porque ni siquiera iban alineados al Plan Nacional de Desarrollo.
Aseguró que todos estos tropiezos deben ser la motivación principal para que Saquicela haya extendido esta invitación al Ejecutivo, la que considera positiva, y que esperan como bancada que Lasso establezca cuanto antes esta mesa técnica “para alinearse no con los intereses de la Asamblea, sino de todos los ecuatorianos”.
“Cuando estuve como coordinadora de la bancada, los diez primeros meses, nunca tuvimos la posibilidad de tener un espacio previo para hacer un check list de las leyes, que podamos hacer observaciones previas antes de que ingresen al trámite que corresponde”, apunta, y subraya que desde la misma sociedad civil se está demandando el contar con estas mesas.
Cabezas destacó la presencia que está teniendo la Función Legislativa en las diez mesas de diálogo entre el Gobierno y el movimiento indígena, con delegados de las comisiones permanentes para coordinar los temas que tienen que ver con la legislación, para que puedan ser trasladados al pleno de la Asamblea a través de proyectos.
El legislador Mario Ruiz Jácome, del ala rebelde de Pachakutik, considera también que es clave que se entienda que se debe trabajar en beneficio del país y que el diálogo entre las distintas funciones del Estado es algo que tiene que hacerse, pero sin llegar a que ninguna se subordine a otra.
“Hay que coordinar, eso es cierto. Nosotros mismos dijimos hace algún tiempo que tiene que existir una comisión, o que tiene que dialogarse previamente al envío de leyes de urgencia económica, por ejemplo. Si el presidente cree que va a pasar sus leyes con los doce asambleístas que tiene, eso es absurdo”, manifestó.
Ruiz dice que el Ejecutivo tiene que necesariamente dialogar con las otras fuerzas políticas y no solo con jefes de bancadas, ya que debe tomar en consideración las diferentes alas que existen en Izquierda Democrática y Pachakutik.
No obstante, Fernando Cabascango, legislador de la otra facción de PK y presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales, reconoce que la propuesta de Saquicela es un gesto que se debe saludar, pero dice que es posible que sea complejo concretarlo debido al modelo de gobierno que tiene Lasso.
“De fondo, esto tiene que ver más bien con el modelo neoliberal que el presidente Lasso quiere implementar en el Ecuador, y ahí es donde se encuentra el punto de partida”, dice, y subraya que todo confluye en “la voluntad política”.
Cabascango reitera además que no se debe olvidar que todos los legisladores responden a proyectos políticos y a una base social; y, en ese sentido, si el presidente no cambia de dirección, será imposible alinearse.
Fuente: El Universo