A Ana, de 41 años, le preocupa que no podría recibir el próximo 3 de mayo el tratamiento de yodo radiactivo.
Esto, ante la advertencia de la Sociedad de Lucha Contra el Cáncer (Solca) de que sería imposible atender a nuevos pacientes oncológicos derivados del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), en el corto plazo, por falta de pago.
Así lo indicó en un comunicado, que fue suscrito por los núcleos de Solca de Quito, Machala, Loja, Tungurahua, Cuenca, Guayaquil, Manabí.
Ana padece de cáncer papilar de tiroides. Ha sido sometida a seis cirugías. Fue derivada del IESS a Solca a partir del 2020 debido a que dejaron de atenderla por la pandemia del COVID-19.
Sostuvo que en ocasiones cuando era atendida en el IESS le tocaba comprar la medicina.
Claudia, de 48 años, fue diagnosticada hace dos años con cáncer de mama. También la derivaron a Solca donde resaltó que hay puntualidad en la atención y le dan las medicinas sin pagar nada.
A ella la operaron, recibió quimioterapia, radioterapia, ha hecho consultas médicas y se ha realizado exámenes. Actualmente está con tratamiento hormonal. Ella estimó en su tratamiento un gasto de alrededor de $ 35.000.
La deuda que mantendría el IESS con Solca superaría los $100 millones a nivel nacional, según Solca.
Solo con Solca Guayaquil hay una deuda de $ 30 millones por atención a 8.000 personas. Con el núcleo de Quito sería de unos $ 60 millones.
José Jouvin, presidente de Solca Matriz, indicó que están atendiendo de la mejor forma y deben recibir el pago correspondiente; caso contrario, acotó, no van a poder continuar.
Agregó que si bien les están cancelando deudas del año pasado, pero siempre hay un atraso de 6,8 meses.
Es consciente de la complicada situación fiscal por lo que es partidario de que haya un plan de pagos.
“Indudablemente son deudas de años anteriores, de 2020, 2021, pero que nos paguen, algo aunque sea, lo peor que puede pasar es que corten el pago total porque yo sigo atendiendo (…) por los problemas que están atravesando los hospitales del IESS no tienen medicinas, no tienen insumos, tienen equipos dañados derivan con mayor velocidad a Solca, entonces eso me incrementa mi cartera por cobrar”, dijo Jouvin.
Este Diario solicitó información al IESS, entre otras preguntas, sobre cuántos pacientes de la entidad se atienden en Solca y a cuánto asciende el valor de esa atención. El departamento de comunicación respondió que se revisará el requerimiento y se pedirá al área correspondiente la información.
También se pidió cifras a la Asociación Nacional de Clínicas y Hospitales Privados del Ecuador sobre deudas por atención derivada. Su directora, Ana Delgado, respondió que siguen “con ese problema”, pero por el momento prefirió no dar declaraciones.
El 24 de enero del 2022, autoridades del IESS hicieron una presentación ante la Comisión del Derecho a la Salud de la Asamblea Nacional, sobre la situación financiera del fondo de salud del IESS.
Según un documento que expuesto vía virtual, la deuda con prestadores externos era de $ 589 millones desglosados de la siguiente manera: entre 2011 y 2017, $ 124 millones; en 2018, $ 34 millones; en 2019, $ 42 millones; en 2020, $ 53 millones y en 2021, $ 336 millones.
El presupuesto del 2022 del IESS para prestadores externos era de $ 213 millones.
En la exposición, Nelson García, director general del IESS, indicó que la deuda a prestadores externos se encontraba en Gestión de Auditoría y Pertinencia Médica que la ley de Seguridad Social la establece para el pago.
Entre las acciones a emprender por el Seguro Social para dar solución a la deuda con los prestadores externos y financiar el fondo de salud estaban gestionar el cobro de la deuda del Estado con el IESS así como promover reformas a la base legal pertinente orientadas a facilitar y fortalecer la gestión de recursos financieros de la institución.
El jueves 7 de abril, las autoridades del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) mantendrán una reunión con los representantes de los núcleos de Solca con el fin de hallar soluciones a esa situación.
Fuente: El Universo