La nueva gasolina ecoplús 89 que Ecuador puso en el mercado en estos días tiene un mejor precio al consumidor en comparación con similares en otros países donde el combustible de 89 y 90 octanos cuesta actualmente hasta $ 6, aún así aguarda a que a medida de que pasen los días su consumo despegue.
El precio referencial por galón de la ecoplús de 89 octanos se estableció en $ 3,89 y rige desde el 25 de agosto que salió a la venta en un plan piloto que cubre tres provincias: Guayas, Los Ríos y Esmeraldas. En las estaciones de servicio se vende entre $ 3,86 y $ 3,99. “Es un precio alto para el consumidor en general (…). Si nos comparamos con otros mercados el precio está dentro de los parámetros regulares, pero la realidad de nuestro mercado y nuestros consumidores es distinta: el consumidor se acostumbró durante mucho tiempo a tener un producto subsidiado, cualquier producto nuevo que no tenga dicho esquema de subsidio les parecerá caro”, comenta José Caballero, quien maneja dos gasolineras que la comercializan.
En el país los precios de las gasolinas extra y ecopaís de 85 octanos están congelados en $ 2,40 tras una baja realizada para terminar con las protestas que paralizaron el país en junio pasado, mientras que la súper de 92 octanos se ajusta cada mes de acuerdo con el precio internacional del petróleo pues no es subsidiada, y asimismo será para la nueva ecoplús.
El próximo 11 de septiembre las autoridades deberán calcular el precio de las gasolinas que no tienen subsidio pues los 12 de cada mes rigen nuevos precios. Caballero considera que se debería esperar al menos tres meses para aplicar un ajuste a la nueva ecoplús 89 por tratarse de un producto nuevo que tiene un desempeño lento que es normal porque recién entró al mercado.
La previsión del sector es que el precio de las gasolinas no subsidiadas baje. El director de la Cámara de Distribuidores de Derivados de Petróleo, Oswaldo Erazo, estima que el ajuste mensual de la súper será a la baja en 6 % en septiembre, al igual que la ecoplús pero en menor proporción.
En Perú se vende gasolina de 84, 90, 95 y de 97 octavos y la que más se aproxima a la ecoplús 89 de Ecuador -la gasolina de 90 octavos- bordea los 18 soles, de acuerdo con los precios que rigen para esta semana en ese país y que equivalen a $ 4,70. El precio más alto reportado por medios peruanos es de 23 soles que son $ 6.
En Nicaragua tanto la gasolina regular como la superior están sobre los $ 5.
En Estados Unidos la gasolina llevaba diez semanas a la baja y en esta subió. En los carteles de gasolineras en la Florida el lunes pasado rozaban los $ 5. La gasolina de grado medio, que es la que cuenta con alrededor de 89 octanos, está entre $ 4 y $ 6 dependiendo del estado, según los precios reportados por el portal gasolinamx.com. Los primeros días de agosto, el galón de gasolina de 89 octanos en Estados Unidos había caído por debajo de los $ 4.
“El precio de la gasolina está subiendo en respuesta a un aumento en el precio del barril de crudo luego que se divulgara que Arabia Saudita pudiera vender menos crudo en un esfuerzo por subir los precios. En los Estados Unidos el valor de la gasolina aumentó alrededor de un 5 % en las últimas tres semanas. No es un aumento brutal, y no se espera que los precios se disparen, pero eso pudiera cambiar dependiendo de la respuesta del mercado de petróleo en las próximas semanas. Además, estamos entrando en el pico de la temporada de huracanes, por lo que no hay que descartar que una posible tormenta fuerte pudiera desestabilizar el trabajo de las refinerías en Texas, Luisiana o Mississippi”, aumentando también los precios, indica el último reporte de la Asociación de Automotores de los Estados Unidos (AAA, según sus siglas en inglés), que recoge Infobae.
Y es que en el mercado de Nueva York el precio del petróleo WTI empezó la semana con una subida de un 4,2 % al llegar a $ 97,01 el barril el lunes 29 de agosto. Sin embargo, al día siguiente cayó un 5,5 % y cerró la jornada del 30 de agosto en $ 91,64.
El crudo de referencia estadounidense había arrancado al alza impulsado por posibles recortes en la producción por parte de la OPEP+ (formada por la Organización de Países Exportadores de Petróleo, Rusia y productores aliados) y las tensiones políticas en Libia e Irak, pero el rumbo cambió este martes cuando los inversores mostraron más preocupación por la alta inflación y una posible recesión que amenaza con reducir la demanda de combustibles, reporta la agencia de noticias EFE.
Fuente: El Universo