Con casi 20.000 nuevos casos confirmados de COVID-19 terminó Ecuador la semana epidemiológica comprendida entre el 17 y 24 de julio, en medio de un rebrote de la enfermedad, anunciado por el Ministerio de Salud Pública (MSP).
Esa cifra supone un incremento de más de 5.300 contagios en comparación con la semana precedente, hace 15 días, cuando hubo 13.655 nuevos contagiados.
El Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional estableció un comité interinstitucional para desarrollar un programa de incentivos para la masificación de la vacunación para completar el esquema de dos dosis y la aplicación de los refuerzos, tercera y cuarta dosis.
Este martes hará en Guayaqui, un nuevo análisis sobre la situación epidemiológica en el país.
Juan Zapata, presidente del COE nacional, sostuvo que se analizará el informe que presentará el MSP así como el avance de la comisión interinstitucional de la vacunación masiva de la función Ejecutiva y conforme a esos datos definir resoluciones. La cita será a las 15:00.
María Brown Pérez, ministra de Educación, informó que de los aproximadamente 4,3 millones de estudiantes que hay en el sistema educativo, un 11,20 % cuenta con el refuerzo, mientras que los docentes, que son 206.826, un 77,53 % tiene un primer refuerzo, y del personal administrativo, un total de 26.037, al 76,16 % se le ha administrado la tercera inyección.
Las provincias en las cuales hay mayor porcentaje de refuerzo estudiantil son Cotopaxi, Tungurahua, Pichincha, Chimborazo, pero las de menor porcentaje son Zamora Chinchipe, Sucumbíos y Morona Santiago.
Brown señaló que se busca replicar una experiencia previa que tuvieron que es fomentar la vacunación en centros educativos y en brigadas dirigidas a estudiantes y docentes así como destinar instituciones a que sean vacunatorios.
“Vamos a tener unas jornadas de vacunación también en Costa para los estudiantes que todavía están en clases, en Sierra, es sobre todo, donde vamos a utilizar estas instituciones como puntos de vacunación y esto se va a sostener, en los próximos meses, a fin de mejorar el porcentaje de vacunación”, indicó.
Acerca de si hay un número específico de unidades educativas destinadas como vacunatorios, respondió que varía cada semana y depende de la evaluación que haga el Ministerio de Salud.
Hay que considerar, agregó Brown, que los estudiantes estuvieron entre la población que empezó a ser vacunada casi al final de los grupos etarios y que para algunos recién se cumple el tiempo establecido para recibir el refuerzo.
El ministro de Salud, José Ruales, manifestó que el COVID-19 vino para quedarse y se deben tomar medidas basadas en evidencia científica por lo que resaltó la eficacia de las vacunas.
Ruales acotó que se necesita que las personas mayores de 50 años sean vacunadas.
En Quito, indicó en una entrevista en Ecuavisa, ha habido un aumento de la demanda hacia los puntos de inoculación y lo atribuyó al riesgo que se podría correr de contagio dado que durante las últimas cuatro semanas hubo un incremento de casos en la capital.
Recomendó utilizar la mascarilla cuando la gente esté enferma o una gripe, dejar de realizar las actividades habituales y mantener medidas como el lavado de manos.
De acuerdo a una análisis de simulación de propagación hecho por la Escuela Politécnica Nacional (EPN), el riesgo de contagio de COVID-19 en Ecuador al 25 de julio, oscila entre alto, muy alto y extremadamente alto, a excepción de Galápagos donde el riesgo es moderado.
Nicolaos Kyriakidis, Ph.D. en inmunología y docente investigador, indicó que el rebrote de casos se evidenció desde hace un mes.
Kyriakidis recordó que el pasado 28 de abril, el Gobierno anunció que ya no era obligatorio usar mascarilla en espacios abiertos y cerrados.
“Probablemente fue una de las causas de estos rebrotes, obviamente también contamos con un porcentaje muy bajo de tercera dosis, de dosis de refuerzo, y también habían otras condiciones como el aparecimiento de nuevas variantes, que son cada vez más transmisibles”, dijo.
Al 24 de julio, el porcentaje de terceras dosis fue de 39,86 %, alrededor de 6´680.000 personas según el vacunómetro, una herramienta creada por el Gobierno para seguir el avance del proceso de inoculación.
Otro factor que, a criterio de Kyriakidis, pudo haber influido, fue el paro que, por 18 días, protagonizó el movimiento indígena, entre el 13 de junio y el 30 de junio para una mayor transmisión.
“Mientras más se transmita este mensaje que no importa si nos infectamos porque ya no se muere tanto la gente (…) y por otra parte, esta transmisión digamos incontrolable del virus, es la que genera las nuevas variantes y va a generar el próximo brote, posiblemente”, opinó Kyriakidis.
Fuente: El Universo